ESTÚPIDA CRISIS
Ya en el año 1997, hace once años, los que supieron del coeficiente de crecimiento chino, debían haberse dado cuenta de lo que significaba para la economía mundial.
La globalización y entrada en la cadena del consumo de cientos de millones de ciudadanos asiáticos no chinos, también era otro factor a tener en cuenta; pero el más importante por su cantidad y calidad era, con mucho, el chino. Muchos de nosotros, sobre todo en mi entorno industrial, hacía tiempo que esperábamos ese resultado.
Mucho antes de esas fechas ya se hablaba y se había demostrado el gran desequilibrio ambiental y la inexistencia en el planeta de suficientes recursos para soportar un crecimiento de tal magnitud, junto el mantenimiento de la calidad de vida del primer mundo.
En el 2005 ya se daban los primeros serios avisos de parón económico junto al desinflado de la burbuja inmobiliaria. En aquellos tiempos, el que escribe entraba en discusiones económicas y políticas de foros donde participaba, se supone, la clase dirigente de nuestro país. Nadie, ninguno de ellos hacía caso, ya no a las predicciones sino lo que cualquier persona que quisiera mirar más allá de un palmo de su nariz podía ver sin demasiado esfuerzo intelectivo. Los economistas, financieros y políticos del foro solo se preocupaban por mantener la burbuja, costara lo que costara, en detrimento del desarrollo económico basado en lo social.
Hoy, los primos de aquellos, aunque de otra sensibilidad política, piensan lo mismo aun sabiendo, puesto que así lo han reconocido, que la solución no está en seguir construyendo sino en aumentar los servicios y su calidad.
Visto todo eso, es inconcebible que un ministro de economía anuncie a bombo y platillo que en el 2010 comenzará la recuperación económica. No sé en que basa su predicción, si es que ha visitado a su astrólogo o alguien le ha leído la mano. Lo que es seguro es que este hombre no puede saber si habrá crecimiento o decrecimiento. En todo caso, con los actuales datos solo se puede prever lo último, lo cual tampoco iría tan mal.
Hoy por hoy, el señor ministro solo puede estar seguro que no puede pagar la devolución de 400€ prometidos tan alegremente por el nuevo gobernante.
Ustedes dirán que considero al ministro algo tonto. Es posible.
No se engañen. Mucha gente, sobre todo en Catalunya, considera a Solbes el mejor ministro de economía de la democracia. Rato tampoco era una maravilla, con él España creció con desmesura pero sin profundidad, gracias, sobre todo, al fondo europeo de cohesión que significaba la mitad de nuestro crecimiento; la otra mitad era exclusiva de la construcción.
Rato tenía categoría y autoridad, pero no calidad; lo ha demostrado con el fiasco del FMI durante su mandato. Solbes tiene poca categoría y menos autoridad, pero más calidad. Ahora bien... ser el mejor no significa ser bueno; además... ¿ya nadie recuerda a Abril Martorell, Fuentes Quintana y Fernández Ordóñez? Esos sí que tuvieron que lidiar con una economía difícil y una deuda inmensa.
Entonces... ¿Por qué nos engañan de esta manera?
Pues porque los socialistas aún creen que el país es el reflejo de los que van a sus mítines. Piensan que somos estúpidos y van de listos, más o menos como Felipe con sus ochocientos mil puestos de trabajo y cien años de honradez, que se convirtieron en dos millones de parados y ocho años de despilfarro y latrocinio.
La economía española, tal como hace muchos años se sustentó en el turismo y después en la construcción, ahora debería incidir sobre una industria manufacturera de calidad y refinamiento, de diseño y exclusividad; junto a haber administrado con cuidado los excedentes de liquidez que el Estado ha disfrutado esos últimos años.
Se debería haber tejido poderoso sistema de servicios sociales y de mantenimiento ambiental, aunque fuera con empresas mixtas. Eso repercutiría en empleos de cierta calidad que servirían para defender el territorio de los difíciles tiempos que nos esperan. Y, por otro lado, para aumentar la calidad de vida del ciudadano utilizando el superávit del tesoro inyectando directamente liquidez en las familias obreras y jóvenes empleados, que son los que mueven más y mejor el dinero, creando gasto, riqueza y nuevos ingresos a las arcas del Estado.
Bien... Ahora nos encontramos sin dinero, ya que otra vez ha sido dilapidado, con los bosques y las costas desatendidos a merced del cambio climático; con un paro imparable a causa de no haber sabido dar solidez al gasto, amparándolo exclusivamente en la nueva construcción; con nuestras industrias más entregadas a producir productos de tercera, para vestir en plan barato las nuevas viviendas (cocinas, baños, azulejos, frigoríficos, etc); productos que los chinos hacen mejor y más barato; y con los Ayuntamientos y Autonomías sin recursos, ya que, gracias a la inteligente estrategia económica de Rato, se sustentaban en la construcción de nueva vivienda.
9 comentarios
Veredas -
Hola Koldo, puedo decirte que tener un blog es bonito.
No leo el habitat salvo en raras ocasiones.Me gustan los blog de gente normalitas que hablan de las cosas del día a día.
Un blog aligera el equipaje interior, libera mucho.
No importa si lo leen pocos o muchos por lo menos en mi caso.
Creo que lo más importante es ver, pasado un breve espacio de tiempo,lo que se escribió en un momento o estado de ánimo.
Se lleva uno grandes sorpresas.
Saludos
pau -
No se engañe amigo Koldo, los blogueros escribimos para nosotros mismos y en un gesto de pornografía y exhibicionismo relatamos lo que nos ocurre y pensamos. Algunos los utilizamos como terapia, otros como escapatoria a las ataduras familiares o sociales y unos cuantos para satisfacer veleidades intelectuales. Y todos, desde el primero hasta el último, esperamos ser leídos por el mayor número de personas posible.
Un cordial saludo.
Koldo -
Soy "Koldo"... uno de los de "El Hábitat..."
Admiro a todos los que tenéis la paciencia de construir vuestro propio "blog" (o como se llame "esto"...). Os admiro por esa necesidad de comunicar "ante el desierto"... Os admiro por disponer de tiempo para ello; por encontrar temas que contar; por... Pues eso: que os admiro a todos.
Yo no sabría tener una web, blog o cualquiera de este tipo de "historias"... Ni sabría qué contar... a no ser que me lo tomara como si fuera una especie de "diario íntimo"... como se supone que hace mucha gente... eso que nunca debes leer de alguien... ni siquiera (o menos aún) si se tratara de un hijo o de tu esposa...
...En ese caso, pues menos aún, que, aunque "anónimo" no dejaría de traslucir tus propias miserias... Además ¿a quién podría interesarle?
Si fuera científico o experto en alguna materia y la web o blog (sí "o como se llamara todo esto"...) también fuera para ese tipo de temas... pues -entonces- seguramente no me importaría colaborar y disfrutar de las colaboraciones ajenas...
"El Hábitat..." me parece "otra cosa": no es ni lo uno ni lo otro; además, los temas (gracias a Tutatis) los elige y expone Muiño (¡chapó!) y los demás, si bien nos dejamos "llevar" con total libertad por lo que nos provocan sus comentarios (y, obviamente, nos apetece hacerlo...), no deja de ser -a mi entender, casi al 50%- un ejercicio tanto de introspección como de extroversión. En fin, que me siento a gusto. Creo que todos nos sentimos muy a gusto. No existe la "responsabilidad" de una "auténtica autoría", como sería la web, el blog (sí, etc...).
Disfruto mucho con los comentarios y puntos de vista y estados de ánimo y prejuicios y juicios de valor y sentimientos de la mayoría de los participantes de "El Hábitat...". Con algunos, siempre. Ése -a mi parecer- es su caso, don Pau. Efectivamente, me parece que siempre nos muestra retazos de lo que ha debido ser (seguro que lo sigue siendo) una interesante vida interior y exterior; que tiene mucho que contar. Se agradece leerles a todos.
Sin buscar ningún beneficio ni propósito. Sólo porque sí...
Un afectuoso saludo, "colega" de "El Hábitat..."
Por cierto: enhorabuena por sus comentarios en éste su propio "blog". Intentaré volver a "entrar" y leer lo que promete contar sobre banca y cajas... (trabajo en el sector financiero: no es que me lo pase especialmente bien con este tipo de temas... es que siempre me resulta curioso ver todos los puntos de vista que cada cual tiene al respecto...)
Veredas -
Tampoco hay que ser demasiado listos para saber que antes o despues ocurriría.
El voto es el voto y a jorobarnos toca.
A mi de pena cuando dicen que ómos un país de servicios - que lo es - Hemos ido dejando todo por el camino, todo lo que era de propiedad pública y algunos se han llenado los bolsillos.
Hay mucho que hacer.
Saludos
Veredas
María -
Besotes
fiorella -
pau -
No vas a creertelo. Estoy seguro que lo sabían, pero no querían creérselo. Cuando ya era demasiado tarde, entre unos y otros (gobierno y promotores), cerraron los ojos a lo inevitable esperando un milagro.
Es increíble pero cierto.
Estamos gobernados por economistas ladrones y estúpidos, pero sobre todo lo último.
Respirando -
No hemos aprovechado bien el tirón, y ahora lo pagaremos. El problema es que siempre lo pagamos los mismos, y nunca lo pagan los responsables. Lo peor, no aprender de los errores, nosotros y ellos.
Lo del "Carpe diem" nos saldrá por un ojo de la cara, pero como es de la nuestra...
Beso, Pau.
carlos martinez -
La pena es no poder dar por saco con caracter retroactivo a todos los que sabian que esto pasaría y no lo evitaron.
Ladrones de guante blanco que se han forrado robando(0 especulando) a base de huntar a políticos. A ver si otro día hablamos de banqueros, que esa es otra.