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UN GATO EN EL BALCÓN

LA ESTRATEGIA DEL AVESTRUZ

 

 

    Los políticos han hecho lo que cabía esperar de su enferma y cobarde mente: regalar cientos de miles de millones a la gran banca. Dicen que con garantías y mienten, que a la ciudadanía no va a costarle un duro y mienten. En España dicen que el dinero saldrá de la venta de deuda pública y lo hará con un interés algo superior... y mienten.

    Nada de lo que dicen es cierto por imposible, absolutamente impracticable. Ni siquiera es posible "donar" tal cantidad de dinero, porque no existe a menos que se fabrique; y lo que es imposible es volver a fingir su existencia.

    El dinero, y en eso no tienen ningún reparo en reconocerlo, es para recuperar "adquirir" las hipotecas o préstamos fallidos (malas según el argot del ministro); por tanto es una donación en toda regla a los que han prestado dinero sin garantías, pero con buen interés, y sin poder recuperarlo. Dinero ficticio negociado con préstamos extranjeros que ahora son imposibles de renegociar por falta de liquidez.

    La economía se va paralizando y el poco dinero disponible para relanzarla se regala a quien la ha estropeado sin saber como va a usarlo, si para pagar unas vacaciones a sus inteligentes consejeros o para renovar el parque automovilístico del banco. No hay control porque no puede haberlo. El dinero tiene la función de regalo. La compra (nacionalización queda feo) de los "activos malos" no sirve para nacionalizar la banca ni para adquirir acciones. El regalo no da derecho al control.

    No podemos crear inflación, no podemos subir los sueldos en función de la subida de precios... sería un suicidio económico. Sólo queda hacer que el ciudadano se ciña el cinturón, gaste menos y aprenda a adaptar su consumo en función a la riqueza que genera; que pague lo que consuma a su precio real según la oferta y demanda que haya de ello.

    Somos mil millones más de consumidores con hambre y posibilidades, y no hay suficiente cobre, cinc, arroz, maíz... para todos.

    No  podemos crear inflación, pero papá Estado, por su cuenta y enterrando la cabeza cual avestruz, todo parece indicar que ha puesto la máquina de hacer billetes en marcha. Ha descubierto que no puede permitir que la banca, el sistema en el cual cree que se sustenta el bienestar de la ciudadanía, se vaya al garete; y que no puede aceptar que el sistema liberal a ultranza hace aguas por todos sitios.

    Papá Estado prefiere que se hunda el ciudadano antes que el sistema. Cree que el primero está supeditado al segundo, que depende de él y no lo contrario.

    Si no fuera por lo que nos espera sería para reír un buen rato.

 

    Uno, que tiene la costumbre de atacar lo que piensa que está mal, ofreciendo a cambio una alternativa, esta vez va a callar. Suficiente se ha hablado sobre el tema: desde el medio ambiente, el reparto de la riqueza, la previsible escasez, la crisis energética, la estupidez del crecimiento... porque todo va ligado. La crisis financiera es una pequeñez, una tontería que en otro momento hubiera podido solucionarse con un ajuste estabilizador. El problema es mucho más profundo y grave, y parece ser que nadie piensa hacerle frente.

 

    Y aunque no sea para reírse, enlazo el último y aleccionador artículo firmado por Fidel Castro.

    Hace tiempo predije que el mundo corría tanto, que pudiera ser que algunos vieran el suyo hundirse mientras otros lo contrario.

    El pasado jueves, un famoso economista norteamericano, de esos que dirigieron la economía de su nación hace años, dijo medio en broma que el Dólar terminaría imprimiéndose con la imagen de Marx. Si alguno de ustedes ha leído "El Capital", sabrá que la actual crisis y su final está descrita hasta el último detalle en su libro, aún de texto en las facultades de economía, aunque parece que a muchos se les haya olvidado.

 

 

    Hoy reedito una foto muy curiosa de Santo Domingo, capital de la República Dominicana y ejemplo del capitalismo moderno y ultraliberal, también de su éxito según los estrategas del mismo. Algo que para algunos demuestra la bondad del ultraliberalismo (que estudien los que tengan dinero para ello).

 

2 comentarios

Pau -

Sí, pero dejemos que se suiciden solos.

Pcbcarp -

Lemmings