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UN GATO EN EL BALCÓN

LA PAZ IMPOSIBLE

 

 

 

 

 

    Annapolis es el nombre que se le ha puesto al último intento de generar una paz duradera en Oriente Medio.

    En 1991, durante la que se llamó conferencia de Madrid, se estuvo muy cerca de ella. Entonces ninguna de las partes estuvo de acuerdo en finalizarla con éxito, Arafat porque pese lo poco firmado en su tierra se le acusó de traidor, e Isaac Shamir, porque no aceptó como interlocutor a la OLP ni tampoco el marco legal de la ONU.

    Ya entonces la paz era algo casi imposible por la cantidad de muerte y odio acumulado, por la cantidad de asentamientos judíos en las tierras palestinas.

    Hoy, después de veintiséis años, del gobierno de Ariel Sharon y muchos otros, de haber aumentado los asentamientos hasta un millón y medio de judíos en tierra palestina, de miles de muertos y asesinados a sangre fría, de haber utilizado el ejército judío a civiles como escudos humanos se pretende recuperar el pulso de la paz.

    Olmert es un político acabado, una caricatura de hombre perseguido por la justicia de su país a causa de innumerables casos de corrupción, y con una derrota militar en manos de un puñado de hombres mal armados. -Desde la muerte de Isaac Rabin, el Estado judío ha estado gobernado por caricaturas humanas que daban más importancia a su enriquecimiento o vanidad personal que al futuro de su país, o por un loco sionista y aun más xenófobo de la cuenta como Ariel Sharon-.

    Abás es un político sin ninguna credibilidad, con su ciudadanía a punto de dar el poder a una oposición que prefiere la muerte a la sumisión, y con un territorio dividido en el que una parte de su población depende de otro gobierno.

    Bush es el presidente de los EEUU más desacreditado de la historia de su país, incluso por parte del poder legislativo. Su cota de popularidad es inferior a la de Nixon en pleno Watergate, alcohólico y con un coeficiente mental –que ya corre por todos los EEUU- por debajo de la media.

 

    No.

    La paz, por muy triste que sea decirlo, aunque Moratinos haya dejado las suelas de sus zapatos y la de todos sus funcionarios yendo y viniendo por todas las cancillerías de Oriente Medio, es imposible.

    Un millón y medio de judíos –fíjense ustedes que omito la palabra israelíes, ya que el estado hebreo se auto declara patria de los judíos, y, en su territorio, aunque los árabes israelíes tengan derecho a estar representados en el parlamento, les faltan los derechos más elementales como ciudadanos, tanto educativamente como sanitariamente- repartidos por todo el territorio palestino, rodeados de alambradas y armados hasta los dientes. Y dos millones y medio de palestinos desplazados en campos de refugiados esperando la luz verde...

    No hay terreno para todos, esto está claro.

 

    Esta frase pronunciada por Golda Meir en 1969 aclara perfectamente el sentir de los judíos en general sobre el pueblo palestino:

    "No existía, como se piensa, un pueblo palestino en Palestina que se sintiera como tal; nosotros llegamos, los expulsamos y les quitamos su país. Ellos no existían"

Golda Meir murió rodeada de gloria, pero como individuo dejó una herencia que, probablemente, al pueblo judío como israelita le va a salir muy cara.

 

    El gobierno judío, haciendo un esfuerzo y en contra de la voluntad de sus aliados parlamentarios, ofrece tierras por asentamientos. Dichas tierras están situadas en medio del desierto al sur de Israel, sin agua ni posibilidad de tenerla. Allí, en medio de la nada, pretenden construir unas ciudades para dos millones y medio de palestinos extirpados de unas tierras ricas en agua, frutales, palmerales y olivos.

    En el caso que Abás aceptara, lo cual es impensable, su propio partido lo abandonaría a su suerte, y eso lo sabe.

 

    La paz se perdió hace sesenta años. Hace cuarenta se hizo muy difícil recuperarla y hace diez se enterró definitivamente. La paz en Oriente Medio es imposible.

 

    ¿Pero qué ha sucedido para que ahora a todo el mundo le haya cogido la prisa?

    La respuesta está en Habbas y Al Quaeda e Irán.

    Los EEUU sin ser derrotados han fracasado. Irak ha sido un completo fracaso, el petróleo sigue sin llegar; los atentados, los asesinatos y el desorden político en el país hacen que la guerra no haya servido para nada, o en todo caso para reforzar a Al Quaeda.

    Día tras día se está viendo que en Afganistán los aliados están en plena retirada. Solo mantienen los frentes con ataques aéreos u operaciones quirúrgicas de pocos días en una región, algo muy parecido a lo sucedido en Vietnam, que entraban en una zona, eliminaban a unos cuantos vietcongs y un montón de civiles, y se largaban cagando leches. Lo que ahora hacen con bombas de fragmentación castigando la zona después de su huída, lo hacían antes con NAPALM. Y todo eso a la espera que el gigante ruso no le apetezca desestabilizar la zona y venda mísiles a sus enemigos talibanes, como venganza por haber hecho los americanos lo mismo con ellos.

    Está claro que Irán conseguirá la energía nuclear, eso si ya no la tiene, puesto que es sabido que cuando un país dice que va es que ya ha ido.

    Irán, como dije en este blog hace mucho, no es Irak. No se le puede invadir y bombardear sin más, sin que medie agresión alguna; hacerlo sería abrir la caja de Pandora. Irán es el objetivo de las miradas de todo el orbe musulmán, que no árabe. Y, aunque chiita, arrastra el ánimo a todos los musulmanes, incluso a los del norte de África y a los asiáticos. Irán, que no su régimen, es donde los musulmanes tienen puesta la vista y esto no se puede obviar.

    Un ataque a Irán significaría el comienzo de la tercera guerra mundial con todo lo que eso comporta. Y solo de pensar que rusos y chinos se puedan mostrar, entonces, condescendientes con su régimen da miedo... Y, señores, no lo duden... lo harían. El petróleo es el petróleo, está justo al lado y apenas deben molestarse en andar para ir a buscarlo.

    Hoy el petróleo lo es todo, por él se declaran guerras, se invaden territorios, se eliminan miles de ciudadanos con la excusa de la democracia, se bombardean ciudades y pueblos, se asesinan dirigentes políticos...

    Invadir Irán sin el beneplácito de rusos y chinos y la ayuda de los primeros es imposible. Para ello se debería armar un imponente ejército, y a la vista está la dificultad que tiene el imperio en disponer del necesario para mantener Irak en un estado calamitoso. Solo de pensar en lo que necesitaría para llevar a cabo una ocupación de tal magnitud marea; sin contar la más que probable desestabilización de todo el orbe, de Pakistán, Indonesia y Nigeria; después la imposible situación de los regímenes amigos como Egipto y Turquía. Seguidamente la segura guerra de Israel en Líbano y su inevitable confrontación con Siria. El caos en Europa con una inmigración musulmana radicalizada en extremo, y con menos petróleo del necesario para mantener la economía. La definitiva pérdida de credibilidad e influencia en Sudamérica.

 

    Y lo curioso es que con el problema de Oriente Medio solucionado, Al Quaeda, Hezbollah, la radicalidad iraní, etc. perderían su razón de ser; que no significa su disolución pero sí su desarme intelectual y, por tanto, el apoyo recibido por musulmania. Y eso todos lo saben.

 

 

 

 

 

 

 

3 comentarios

pau -

Ja ja ja
Pues sí.
Hoy, un amigo me dice que el pesimismo produce derrotismo y abandono.
Pienso que no es del todo así, que también produce reacción rabiosa. Y esto es lo que se necesita, una reacción asesina de ser necesario.
¿Por qué deben vivir los que desprecian la vida?

carlos martinez -

A mi desde luego no se me ocurre nada para solucionar eso. Cuando estamos en manos de tarados mentales como el americano, y con tanto prejuicio religioso de todos esos enviados de todos los dioses, a lo mejor se podría poner a todos a invocar a su dios a ver si se aparece y lo arregla. Y si no aparece ese dios unico y verdadero, mandar a sus representantes al otro mundo a buscarlo.
Esta jilipollez son como las que dice "mazinger" y es Papa, o sea que muy descaminao no voy..

Pcbcarp -

Brillante, como siempre, profesor. De todas formas, lo de Israel está sentenciado y ellos lo saben. Es cuestión de tiempo que la población árabe supere a la judía y entonces ya veremos qué pasa (o lo verán nuestros hijos)

En cuanto a lo de Irán, ya veremos en qué acaba, porque los líderes de Estados Unidos e Israel han dejado más que demostrada su absoluta incompetencia (quiero decir: estupidez)

Sigue preocupándome más Pakistán. Eso también es cuestión de tiempo que pete, salvo que ocurra algún milagro. Y en el Islam no hay milagros.